Autoridades presentaron medidas sociales adoptadas en países del Mercosur para enfrentar la pandemia

El seminario internacional sobre "Políticas de recuperación económica e innovaciones en material de protección social para mitigar los efectos de la pandemia por Covid-19 en el Mercosur", desarrollado en el marco de la presidencia Pro Tempore del Mercosur, permitió conocer las medidas adoptadas por los gobiernos en el marco de la crisis sanitaria  el impacto de la inversión social, para la atención a sectores vulnerables y de mayor riesgo. 

Este foro fue organizado por el Ministerio de Desarrollo Social (MDS), el Instituto Social del Mercosur, con el apoyo del Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur (FOCEM) y contó con la participación de los estados parte del bloque. 

Atención integral a sectores vulnerables

En el contexto del panel "Políticas de Reactivación Económica Post-Covid" el embajador extraordinario y plenipotenciario del Uruguay, Fernando Sandin Tusso, expuso ampliamente las medidas coyunturales y la inversión financiera que permitió atender con  eficiencia a los sectores de mayor vulnerabilidad sanitaria y socioeconómica.

En este sentido, mencionó que las medidas consistieron en transferencias monetarias bajo diversos programas como la tarjeta de Asignación Familiar, Uruguay Social, Plan de Equidad y Asignación de Emergencia, que permitieron realizar transferencias extraordinarias a más de 200 mil hogares, que representan unas 820 mil personas, que constituyen una población aproximada de 1 millón de personas.

Mencionó que otro sector atendido en el marco de la pandemia fueron las personas en situación de calle, lo cual es un problema creciente en nuestras sociedades;  en cuyo caso “han sido atendidos positivamente estableciendo centros de cuarentena para positivos de covid-19, fueron extendidos los centros de atención diurna a 24 horas, para personas en condiciones de riesgo sanitario, deterioro físico y cognitivo y para los que registran necesidades de atención en salud mental”.

Citó además que “se ampliaron los centros de atención nocturna a 24 horas en todo el país”.

El sector de la niñez especialmente vulnerable también fue atendido con medidas de apoyo a la primera infancia, que se focalizó en hogares con niños de 0 a 3 años y se elaboró el plan de primera infancia, con una inversión de aproximadamente 30 millones de dólares. Estos fondos se distribuyeron para los planes de bono crianza para hogares con menores de 0 a 3 años, que recibieron transferencias monetarias de 50 dólares por familia, que en total fueron beneficiados 25 mil hogares. Fueron implementadas becas socioeducativas, se duplicaron las becas para que menores accedan a centros privados en los lugares donde no hay lugares donde las madres envíen a sus hijos para poder trabajar

Se incrementaron los recursos y técnicos sociales para acompañamiento familiar, así como la capacitación temprana para situaciones de riesgos. Igualmente la educación pública en 2020 y 2021, proveyó alimentación gratis para estudiantes, incluso en periodos de vacaciones por primera vez, lo cual alcanzó a más 180 mil niños en todo el país, explicó el diplomático.

El gasto total  destinado al fondo fue de 1.153 millones de dólares, lo que representa el 1.9% del Producto Interno Bruto (PIB), expresó Sandin Tusso.

Experiencia trasformada en cooperación

Por su parte, Alfredo Ferreira, asesor del Ministerio de Ciudadanía de Brasil, expuso las medidas sociales de emergencia adoptada por el gobierno de su país en el marco de la pandemia de Covid-19, que al mismo tiempo representó desafíos y oportunidades de crecimiento y fortalecimiento, sin perder de vista principios como la libertad y la democracia.

“Brasil es un país de gente trabajadora y luchadora y el enfoque del gobierno ha respetado la autonomía de las familias, evaluando la eficiencia de nuestras políticas públicas en la medida que los ciudadanos se muevan más libres e independientes”, indicó.

Sostuvo que cuando se trata de protección social, nuestra mirada esta siempre en el ciudadano que más necesita  conociendo cada realidad. En ese contexto las medidas implementadas fueron iniciativas ajustadas a esa individualidad.

Explicó que como respuesta a la crisis de la pandemia nació la iniciativa del programa denominado “Auxilio Brasil”, donde más allá de la protección social, la propuesta es la promoción de una integración y articulación de políticas y programas de acciones directas e indirectas, desarrollo de la niñez y estímulo al desarrollo del emprendimiento, el microcrédito, la expresión colectiva rural y urbana y a la emancipación ciudadana.

La innovación más grande consistió en la integración, con políticas de asistencia social, salud y educación. Citó que el total son diez diferentes modalidades de beneficios, de los cuales cinco integran el núcleo básico y cinco los de beneficios complementarios, con vistas a estimular la autonomía de los beneficiarios.

“Todas las familias, en situación de pobreza y vulnerabilidad, tienen acceso a estos beneficios que garantizar el ingreso básico y una canasta de auxilio  que ofrece medios para superar la vulnerabilidad social”, señaló.

Con estos datos se visualiza la manera en que los programas de auxilio tienen la capacidad de generar mejorías, haciendo la diferencia en la vida de los ciudadanos, promoviendo un camino nuevo con dirección a la autonomía.

Los desafíos nos alientan a la continuidad, trasparencia y honestidad. “El hambre no puede esperar y la respuesta del gobierno a la pandemia es la constante atención a los que más necesitan, expresó el funcionario.   

“Nuestro norte es triplicar los recursos a la asistencia respetando con rigor la lucha por la seguridad alimentaria y nutricional especialmente la primera niñez y la apertura a  nuevas puertas al trabajo, estudio y productividad”, sostuvo.

Reiteró el compromiso del gobierno con la democracia, el estado de bienestar y desarrollo de la región mediante este tipo de foros y a través del dialogo y la disposición para cooperar con los socios regionales.